Tras investigaciones prolongadas, los expertos de empresa de gestión de residuos han demostrado que la utilización de Contenedores de Obra y Escombros facilita de manera exponencial el uso y reutilización de restos de construcción o demolición como material para fabricar carreteras. Esta alternativa es igual o mejor que el asfalto, poniendo así una solución en el tratamiento de este tipo de residuos.
Aunque no lo parezca, el reciclaje tiene mucha más vida más allá de los clásicos contenedores amarillo, verde y azul. Gracias a las nuevas tecnologías, aparecen los contenedores de obra y escombros y sus correspondientes plantas de tratamiento de residuos, para que cada vez sean más los materiales a los que se les puede dar una segunda vida y así reducir la producción de carbono, como lo hacen los restos que se colocan en contenedores de obra y escombros.
Estas investigaciones realizadas han demostrado la viabilidad de estos materiales en una obra real y por un largo periodo de tiempo.
En el primer momento de las investigaciones, se planteó que los escombros obtenidos en contenedores de obra y escombros de diversas labores de construcción o demolición fuesen expuestos a procesos de reciclaje y reutilización, utilizándolos para construir un tramo experimental en una carretera por la que pasan más de 9.000 vehículos diarios.
La idea se aprobó, y se construyeron varios tramos de carretera con el asesoramiento de empresa de gestión de residuos: uno con materiales comunes en este tipo de infraestructuras, y otro en el que se emplearon dos tipos de materiales reciclados, áridos reciclados mixtos, procedentes de los tabiques y estructuras de las viviendas, y áridos reciclados de hormigón, generados a partir de los cimientos de las casas.
Ahora, diez años después, el estudio concluye que los materiales reciclados de demolición conseguidos a través del uso o alquiler de contenedores de obra y escombros son una buena alternativa, en incluso mejor en este caso, para la construcción de carreteras.
Por otro lado, además de constatar el buen comportamiento de estos materiales, el equipo de investigación ha querido poner su grano de arena para contribuir a la sostenibilidad del sector de la construcción, promoviendo el uso o alquiler de contenedores de obra y escombros. Para ello, se instaló durante el desarrollo del estudio una planta de reciclaje in situ, lo que permitió reducir el impacto de dióxido de carbono que ocasiona el transporte de materiales.
En este sentido, se ha destacado que existen numerosos casos en los que se reciclan estos escombros de manera ilegal y sin garantía de calidad ninguna y que, por ello, es fundamental contar con empresas de gestión de residuos que puedan garantizar la calidad de los materiales de los contenedores de obra y escombros, para su adecuado tratamiento para reutilización.
Cabe destacar que la demolición de edificios siempre ha generado una gran cantidad de residuos, y que hasta no hace mucho tiempo, han terminado depositados en vertederos. Desde que se estableció el Plan de Gestión de Residuos en Madrid, se ha obligado a las empresas dedicadas al sector de la construcción, a contar indefectiblemente con contenedores de obra y escombros que faciliten y promuevan la reutilización de este tipo de residuos.