Los restos vegetales y de poda no son residuos domésticos y es muy importante contar con las herramientas necesarias como los contenedores de poda para su acopio adecuado y responsable posterior retirada de poda. Aquí te contaremos por qué es importante seguir estos pasos.
Los residuos vegetales y restos procedentes de la poda no son considerados ni tratados del mismo modo que los son los residuos domésticos, por lo que no deben ser vertidos en contenedores de este tipo, tampoco pueden ser depositados ni abandonados en ningún tipo de terrenos (ya sea público o privado), sino que deben ser acopiados y depositados en contenedores de poda específicamente destinados a tal fin para facilitar una retirada de poda correcta y eficiente.
Debido al tamaño, forma y consistencia de estos residuos, sobre todo los restos de la poda de árboles y arbustos, verterlos en un contenedor domiciliario reduciría considerablemente su capacidad y daría lugar a situaciones de desbordamiento, con los inconvenientes que ello conlleva (acumulación de bolsas en las aceras, malos olores, insectos, suciedad) y a la dificultad de la retirada de poda y separación de residuos pertinente para su posterior reciclaje o reutilización.
Además, este tipo de residuo podría provocar averías en el mecanismo compactador de los vehículos recolectores, provocando la merma del servicio y el consiguiente coste para el Ayuntamiento y sanción a la persona que los arrojó allí y no cumplió con la normativa vigente del Plan de Gestión de Residuos.
¿POR QUÉ SE HACE HINCAPIÉ HABITUALMENTE EN LAS HOJAS DE PALMERA?
Es importante aclarar que, en cualquier caso, no se realizará la retirada de poda de los restos de hojas de palmeras, ya que para estas labores es necesario que la poda se ejecute por personas capacitadas y que acrediten el saber. Por esto, en caso que se precise la limpieza, poda, desmalezamiento de este tipo de vegetal, se recomienda contratar a una empresa de Gestión de Residuos que realice la labor completa: desde la poda, la recogida, la retirada de poda y disposición final donde corresponda.
QUÉ SE PUEDE HACER CON LOS RESTOS DE LA PODA?
Existen varias opciones para deshacerse de estos residuos, colaborando con el medioambiente y promoviendo la aplicación de la regla de las 3R: Reducir, Reciclar, Reutilizar:
1. Contratar un servicio de recogida de podas
Puedes acudir y solicitar a empresas destinadas a la realización de esta labor, distintos servicios que incluyen, desde la limpieza o desmalezamiento de las plantas (o terreno), el alquiler de contenedor de poda, recogida y retirada de poda, disposición final en plantas de reciclaje.
Es importante que la empresa esté autorizada por el Ayuntamiento para la ejecución de dicha actividad y que sean los profesionales los que se encarguen de asesorarte sobre las licencias que debes tener para la instalación de un contenedor de poda en la vía pública.
2. Trasladar los restos de poda a los Puntos Limpios
Si bien puede sonar bastante simple esta opción, déjanos decirte que quizás no lo sea. ¿Por qué? Porque deberás contar con un espacio en el interior de tu vivienda para el acopio de los restos de poda, luego tendrás que pensar en cómo trasladarás los restos hasta los Puntos Limpios, a sabiendas que deberás regirte por los tiempos y habilitaciones de cada Punto.
A modo de repaso, si optas por esta opción y no por el servicio completo de retirada de poda con contenedor de poda incluido, deberás contemplar dónde acopiar, cómo trasladar y dónde depositar.
3. Utilizarla para hacer su propio compost.
¿QUÉ TIPO DE SANCIÓN SE RECIBE POR HACERLO DE MODO INCORRECTO?
Atendiendo a lo dispuesto en la Ordenanza Municipal de Limpieza Pública, está especialmente prohibido el depósito o vertido incontrolado de restos poda en cualquier contenedor.
Verter poda de forma incontrolada y que no sea en contenedores de poda conlleva sanción de terreno o vía, sea pública o privada, siendo responsabilidad de quién realiza el vertido la posterior retirada de poda.
El incumplimiento de esta normativa tendrá la consideración de infracción leve y está penalizado con una sanción de hasta 120 € pudiendo, además, requerirse el pago del coste de los trabajos de retirada de poda realizados por el Servicio de Limpieza.