Debido a una segunda ola de Coronavirus, en la ciudad de Madrid han debido clausurarse 3000 parques y jardines en horarios de 22:00 a 6:00. Con esto se pretende evitar las aglomeraciones de personas, botellones, etc. y así controlar que no existan mayores contagios de la Covid-19
En época estival, los espacios públicos y piscinas, son lugares elegidos por cientos de personas (en su mayoría jóvenes) para pasar una tarde al aire libre. El problema de ésto es que no se han respetado las normas impuestas desde gobierno para proteger la salud y evitar contagios. Pero esta segunda ola del virus ha obligado a extremar las medidas de prevención.
Y aunque por una parte, esta noticia puede resultarnos inquietante, debemos recalcar las consecuencias positivas medioambientales de este tipo de medidas. Bien sabemos que los espacios públicos en la ciudad de Madrid (y debido a la concentración de gente anteriormente mencionada) son focos de contaminación. Toneladas de residuos se generan allí al final de cada temporada veraniega. La Gestión de Residuos del Ayuntamiento, se ve algo complicada en las tareas de retirada de residuos ya que se imposibilita muchas veces el acceso a los contenedores dispuestos en esos sitios. Además de esto, muchas de las personas que visitan estos parques, no contribuyen con las labores de separación de la basura para su reciclaje (habiendo contenedores de distintas facciones en algunos lugares) esto complica la recogida de residuos y el transporte hacia la planta de tratamiento.
El Ayuntamiento garantizará el cumplimiento de restricción del acceso con controles masivos y estrictos aunque en áreas donde no existe vallado pueda resultar prácticamente imposible. A su vez, se debería llevar adelante tareas de desinfección y limpieza, y se podrá mayor énfasis en mejorar los sitios donde están dispuestos los contenedores y modificarlos de manera tal que la recogida de residuos sea eficiente.
El Coronavirus vuelve a ponernos en alerta, debemos respetar las normas de higiene y salubridad en todos los ámbitos en los que nos encontremos ya que solo así lograremos ganar esta batalla.
Pero no debemos olvidarnos que también tenemos una deuda con nuestro medioambiente y es nuestra responsabilidad cuidarlo así como es nuestro el compromiso de hacer todos los días una pequeña acción para reducir la contaminación, ya sea en nuestro hogar, el trabajo o visitando los parques públicos de nuestra ciudad.